Hora
Jueves
25 de abril de 2024
S O L O   I N F O R M A C I Ó N   D E   P R I M E R   N I V E L

No a la crisis constitucional que busca Morena

Modificarán Constitución para que Martha Erika pueda tomar protesta en el Tribunal Superior de Justicia ante posible protesta de los diputados de MORENA


Diario Cambio 31/JUL/2018 10:54

Arturo Rueda, Columna “Tiempos de Nigromante”.- La narrativa del “fraude electoral” de 2018 tienen mucho paralelismos con la narrativa de la disputadísima elección presidencial de 2006 y que derivó en la crisis constitucional que dio inicio el 28 de noviembre de ese año, cuando diputados federales del bloque PRD-PT-MC tomaron la tribuna de San Lázaro con el objetivo de impedir que Felipe Calderón tomara protesta como presidente de la República, metiendo al país en el abismo del vacío de poder.

La crisis constitucional era muy clara y no un mero debate legalista, pues se debatió si la toma de protesta era solamente un acto protocolario que Calderón podía saltarse sin consecuencias legales, o realmente se trataba de un tema vinculante al ejercicio del poder y sumisión a la Constitución, con lo que no acudir a San Lázaro provocaba que Felipe Calderón no pudiera ejercer como Presidente.

Las escenas de esos últimos días de noviembre de 2006, claro, son vergonzosas. El Congreso de la Unión, más que un circo, se convirtió en un ring donde panistas y perredistas se golpearon, abofetearon, lanzaron curules, e incluso cerraron con cadenas y candados los accesos al salón principal de San Lázaro.

La orden de AMLO a sus huestes fue clara: impedir que Calderón tomara protesta y México ingresara a la espiral del vacío del poder.

Sin embargo, una operación del Estado Mayor Presidencial -con el apoyo de Beltrones y el PRI- permitió que Calderón ingresara por uno de los estacionamientos prácticamente escondido en una camioneta, e ingresara al Salón por la puerta de atrás para realizar la toma de protesta entre gritos desaforados de “usurpador” y “ladrón de la Presidencia”, mientras las curules hacían de barricadas.

¿Qué hubiera ocurrido si Felipe Calderón no hubiera acudido a San Lázaro, aun en condiciones tan complejas? Pues nadie lo sabe.

El morenovallismo prevé un escenario semejante al de 2006, pues la próxima mayoría le apuesta a todo, incluso al vacío de poder, con tal de que Martha Erika Alonso no pueda asumir la gubernatura del estado y meter a Puebla en un escenario de vacío de poder.

La postura irreductible e irresponsable de Pinky Biestro, el único escudero real que le queda a Luis Miguel Barbosa en su narrativa del fraude, han llevado al morenovallismo a ejecutar una reforma constitucional preventiva para que el gobernador, ante la imposibilidad de tomar protesta en el Congreso, pueda hacerlo ante el presidente del Tribunal Superior de Justicia y sin que se defina un lugar específico.

La reforma es correcta frente al radicalismo con la que actúan Biestro y compañía, cuyo objetivo es la desestabilización del estado si sus intereses políticos, la nulidad de la elección de Puebla, no se concede en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, como ya se prevé que vendrá el fallo.

Entonces dirán que el largo y poderoso brazo de Moreno Valle se impuso entre los magistrados del TEPJF, que los laboratorios electorales, que la desaparición de las actas hasta por 48 horas y bla bla bla….nada los va a satisfacer.

Desafortunadamente, los números los apoyan en el próximo Congreso, ya que con sus 22 diputados, pueden sabotear la toma de protesta de la forma más sencilla: no reunir el quórum legal. Ni siquiera tiene que haber golpes y sillazos como en 2006: sin quórum no puede haber sesión.

Así que con la reforma preventiva, inspirada precisamente en la modificación que aprobó el Congreso federal para evitar que se repitiera un circo y el Presidente de la República pueda tomar protesta ante el presidente de la Suprema Corte de Justicia, se aborta uno de los momentos más tensos de esa magna obra del Fake News que se llama “el fraude electoral en Puebla”.

Pueden hacer berrinche y patalear, pero en realidad solamente se asumen en la Constitución local lo que ya establece la federal: tomar protesta ante el presidente de la SCJN, y a nivel local en el TSJ. (DIARIO CAMBIO)

¿Qué opinas?