Los apoyos incluyeron sillas de ruedas, andaderas, bastones y otros aparatos necesarios para facilitar la vida diaria de quienes presentan movilidad reducida, cada entrega fue realizada en los hogares de los beneficiarios por el equipo de salud y trabajo social del DIF, que se encargó de verificar necesidades y brindar orientación sobre su uso adecuado.

Monserrat Andrade Hernández, reiteró que la prioridad es fortalecer la inclusión y asegurar que todas las personas tengan acceso a herramientas que les permitan mayor autonomía. Explicó que estos aparatos representan un cambio significativo en la calidad de vida de los beneficiarios y destacó el valor de acercar directamente estos recursos.

Además de las entregas gestionadas mediante programas del SEDIF, el organismo también logró concretar apoyos derivados de solicitudes directas por lo que la presidenta del DIF reconoció que el trabajo conjunto permitió cubrir un mayor número de casos y mantener un acompañamiento cercano con las familias beneficiadas.

Además aseguró que continuará desarrollando acciones para respaldar a los sectores vulnerables, reconociendo la importancia de mantener un servicio eficiente y humano agradeciendo a quienes han colaborado para que estas entregas sigan llegando a quienes lo necesitan.