La propuesta aprobada en la comisión establece que las y los estudiantes reciban formación sobre ciencias ambientales, bienestar animal, desarrollo sostenible, prevención del cambio climático, así como conservación y uso responsable de los recursos naturales, con ello se busca que la educación pública incorpore temas que ya son considerados prioridades nacionales y que requieren atención desde las etapas iniciales del aprendizaje, incorporando áreas clave como Educación ambiental para la sustentabilidad, Bienestar y protección animal, Prevención y combate al cambio climático, Desarrollo sostenible y conservación de recursos naturales y Participación social en la protección del medio ambiente.

Uno de los puntos que dieron origen a esta reforma es que México reconoce constitucionalmente a los animales como seres sintientes (artículos 3°, 4° y 73°) y prohíbe su maltrato, sin embargo, persiste el desafío de generar una educación que fomente la compasión, la responsabilidad y un trato adecuado hacia los animales desde la infancia, para impactar de manera directa en el comportamiento social y en la protección del entorno.

Con la aprobación en Comisión, la Secretaría de Educación Pública y las instituciones educativas podrán avanzar en la creación de contenidos que fortalezcan la conciencia ambiental y social entre las nuevas generaciones con la intención de que las escuelas cuenten con herramientas actualizadas y alineadas a los retos ambientales y éticos que enfrenta el país.

Tras superar esta primera etapa legislativa, la iniciativa se dirige ahora al Pleno de la Cámara de Diputados, donde será discutida y votada para su posible aprobación final, de avanzar, representará un paso significativo para consolidar políticas educativas que integren la protección del ambiente, el bienestar animal y la formación de ciudadanos informados y responsables.