Ya habían cerrado la carretera federal en días pasados, ayer tomaron la presidencia municipal de Teteles, interceptado un autobús de la línea Vía y lo secuestraron con su operador y realizaron protestas en la caseta de Atempan y Cuapiaxtla donde acusaron destrozos, sus exigencias incluyen respeto a su organización interna, inscripción inmediata de alumnas de nuevo ingreso, entrega de materiales escolares y destitución de direvtivos de la normal a los que acusan de autoritarismo.

El domingo 31 de Agosto comenzaron esta nueva jornada de presión al interceptar tres autobuses, dos de la línea Vía y uno de turismo, en la autopista Teziutlán-Virreyes. En su trayecto vandalizaron casetas de cobro en Atempan y Cuapiaxtla, dañaron cámaras de seguridad y permitieron el paso sin pago solicitando “donaciones voluntarias”, con esas mismas unidades llegaron a la capital poblana, donde bloquearon la circulación en el Centro Histórico y lanzaron consignas contra el gobierno estatal.

La tensión llegó al límite ayer cuando, además de exigir a la Fiscalía General del Estado que dé carpetazo a investigaciones en su contra por sus actos bandalicos y violentos, incendiaron llantas y ropa para después prender fuego a un camión de RUTA, acción que marcó un precedente en sus manifestaciones, pues nunca antes habían recurrido a la quema de unidades de transporte. Las estudiantes intentaron huir en los autobuses secuestrados, pero fueron interceptadas por policías estatales y municipales; finalmente a la intervención de la Comisión de Derechos Humanos, se evitó que fueran detenidas y continuaron su recorrido.

El gobierno de Puebla explicó que la mesa de diálogo pactada para el 27 de agosto se suspendió porque las normalistas llegaron acompañadas de hombres adultos y encapuchados, ajenos a la institución, quienes se negaron a identificarse, la Secretaría de Gobernación advirtió que no permitirá la intervención de terceros en el conflicto y calificó como “infiltrados” a esos sujetos, de quienes se desconoce su verdadera intención dentro del movimiento. Mientras tanto, las investigaciones por daños a la infraestructura y al transporte público continúan abiertas.