Los peores políticos de la región de Teziutlán que sumieron a sus municipios en el retroceso y la corrupción
Desvío de recursos, abuso de autoridad e inseguridad fue lo que ofrecieron en Teziutlán, Tlatlauquitepec y Chignautla, uno de ellos tiene antecedentes penales y ya estuvo en la carcel en dos ocasiones
Diario Enfoque 07/MAY/2025 14:15
Alberto Rojas , Columna ENFOQUE PRIVADO .- Aarón Bonilla, Porfirio Loeza Aguilar y Toño Vázquez se han convertido en ejemplos claros de lo que significa un mal gobierno en Teziutlán, Tlatlauquitepec y Chignautla, pues durante sus administraciones este trío de políticos corruptos y abusivos destacaron más por sus escándalos que por sus logros. Aarón Bonilla de Movimiento Ciudadano fue criticado por su falta de liderazgo, la opacidad en el manejo de recursos, corrupción e inseguridad con robos, asaltos, asesinatos y hasta feminicidios así como escándalos personales que fueron exhibidos por su entonces pareja y presidenta del DIF, ya que las mujeres fueron uno de sus principales vicios. Por su parte Porfirio Loeza quien ha pasado de partido a partido en los últimos años acumuló señalamientos de corrupción, desvío de recursos públicos, nepotismo, corrupción, enriquecimiento y un estilo autoritario que provocó el rechazo incluso de integrantes de su propio cabildo. Mientras que el gobierno del expanista Toño Vázquez en Teziutlán estuvo marcado principalmente por corrupción e inseguridad, mal manejo de recursos públicos y una alarmante situación de inseguridad ya que durante su gobierno se registraron alrededor de 50 secuestros muchos de los cuales nunca se resolvieron y muchos otros terminaron en asesinato, además de que estuvo encarcelado en dos ocasiones la primera en 1997 y la segunda en 2022. A pesar de este oscuro historial, los tres han reaparecido en la escena política lanzando críticas a sus sucesores, sin asumir las consecuencias de sus gestiones fallidas, sumándose a proyectos políticos o conspirando para desestabilizar la paz social en sus municipios.
Aarón Bonilla dejó un legado de opacidad y desinterés por la seguridad de los habitantes de Chignautla a pesar de las crecientes demandas de la ciudadanía, su administración no logró implementar estrategias efectivas para combatir la inseguridad, dejando a la población vulnerable ante diversos delitos y sobre todo vulnerable ante los elementos de Seguridad Pública quiénes en distintas ocasiones agredieron a la población y sus víctimas nunca obtuvieron justicia. Además, en su gobierno se registraron innumerables escándalos, muertes dentro de los separos de la policía y las brutales golpizas y abusos de los efectivos policiacos así como feminicidios, balaceras y asaltos pues hay que recordar que mujeres fueron asesinadas en actos sumamente violentos, uno de estos casos ocurrió en Mayo del año pasado cerca de la empresa Coca-Cola donde fue hallado el cuerpo de una mujer de alrededor de 30 años, apenas un mes antes se registró el feminicidio de Margarita "N" en una vivienda de la calle "Moctezuma" y en Noviembre del 2023 se registró otro en la comunidad de Tepepan cerca del establecimiento "Cerquita del Cielo".
Por su parte, Porfirio Loeza Aguilar, quien ha sido presidente municipal de Tlatlauquitepec en cuatro ocasiones, ha estado envuelto en múltiples escándalos de corrupción y abuso de poder, en 2011, el Congreso del Estado aprobó su destitución por un manejo irregular de recursos al no comprobar cerca de 19 millones de pesos ejercidos durante su primera gestión, además, fue inhabilitado para ocupar un cargo público por 11 años y se le impuso una multa millonaria. A pesar de estas sanciones, Loeza Aguilar continuó en el poder, lo que generó protestas por parte de regidores y ciudadanos que exigían su salida del cargo y a esto se le suma que su incompetencia llegó a tal grado de ocasionar que la comunidad de Tepeteno prefiriera buscar su autonomía económica para hacer sus propias obras en beneficio de los pobladores. Pero lo que no tuvo madre fue que amparado como presidente municipal de Tlatlauquitepec el cuatrero le dono a su hija una propiedad del pueblo que es "Casa Olvera" la cual por fortuna las actuales autoridades municipales ya recuperaron y esta nuevamente al servicio de los tlatlauquenses.
Durante su última administración, Tlatlauquitepec experimentó un aumento significativo en los índices de criminalidad, incluyendo homicidios, robos y abusos sexuales, incluso entre Octubre y Diciembre de 2021, la Fiscalía General del Estado inició 124 carpetas de investigación por diversos delitos, un incremento considerable respecto al mismo periodo del año anterior. A esto se le suman un sin fin de señalamientos por parte de la población pues se dieron cuenta del enriquecimiento que logró él y su familia tras convertirse en presidente.
Durante el gobierno de Antonio Vázquez Hernández en Teziutlán (2014–2018), se registraron múltiples irregularidades administrativas y una grave crisis de inseguridad, particularmente relacionada con secuestros, en el ámbito financiero, una auditoría reveló un desfalco de aproximadamente 200 millones de pesos, entre las irregularidades más notorias se encontraron obras públicas reportadas como concluidas pero inexistentes o inconclusas, como la rehabilitación del Parque El Pinal, que fue reportada con un costo de 18 millones de pesos, aunque en realidad solo se invirtieron cerca de 3 millones, también se detectaron contratos inflados y falsificación de firmas para beneficiar a constructoras cercanas al exalcalde y hacer pasar obras concluidas al cien por ciento cuando estás estaban aún en proceso o detenidas lo que lo llevo nuevamente a la cárcel del 2022 al 2023, ya que Antonio Vázquez ya había sido encarcelado en 1997 por el delito de robo.
Además, se descubrió la venta irregular de al menos 14 vehículos oficiales sin la documentación legal correspondiente, lo que provocó pérdidas por alrededor de cuatro millones de pesos. Estas acusaciones culminaron con la detención de Antonio Vázquez Hernández en noviembre de 2022, por falsificación de documentos y daño patrimonial, pero fue liberado en Agosto de 2023 tras llegar a un acuerdo de reparación del daño por 25 millones de pesos el cual al aparecer no a pagado, sin olvidar que ya había estado encarcelado en 1997 acusado del robo de máquinas industriales de coser lo que hizo amparado como notificador del seguro social, puesto que aprovecho para hacerse de las máquinas para poder emprender su taller de maquila propio.
En cuanto a la seguridad pública, el gobierno del delincuente y expresidiario estuvo marcada por una preocupante ola de secuestros, tan solo en 2017 se registraron al menos 9 casos, y en 2018 se sumaron otros 4 en los primeros meses del año haciendo un total de más de 50 secuestros mientras él fue Presidente Municipal de Teziutlán, las víctimas incluyeron ciudadanos comunes, jóvenes, niños, mujeres, comerciantes y empresarios, algunos fueron liberados tras el pago de rescates, pero otros fueron encontrados muertos e incluso hubo casos donde, a pesar del pago de rescate, las víctimas fueron asesinadas y de otros jamás se supo su paradero. A pesar de todo este historial Morena reclutó al delincuente para apoyar la campaña de la actual Presidenta Municipal de Teziutlán Karla Martínez y lo nombró presidente del concejo ciudadano de Ayotoxco dónde se realizaron elecciones extraordinarias, cargo que ostentará hasta finales de este mes.
A pesar de los cuestionamientos y las evidentes deficiencias en sus gestiones, tanto Aarón Bonilla como Porfirio Loeza y Toño Vázquez insisten en permanecer en el ojo público a través de publicaciones en redes sociales criticando a los gobiernos actuales, realizan acciones y encuentros para desestabilizar a sus municipios sin reconocer sus propios errores y omisiones. Estas críticas han sido vistas por la ciudadanía como intentos de desviar la atención de su propio desempeño y de evitar asumir la responsabilidad por los problemas que enfrentaron sus respectivos municipios durante sus administraciones.
El legado de estos tres personajes está marcado por la corrupción, la inseguridad y la falta de compromiso con el bienestar de la ciudadanía por lo que es fundamental que las autoridades actuales asuman la responsabilidad de mejorar las condiciones en estos municipios y trabajen para recuperar la confianza de la población procurando que la rendición de cuentas y la transparencia sean pilares fundamentales en la gestión pública para evitar que situaciones similares se repitan en el futuro. ¡Hasta la próxima!
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