Aprovecharon este momento para escuchar sus experiencias y resaltaron que su trabajo es esencial para que los estudiantes inicien el día con energía y cuenten con alimentos preparados de manera higiénica y nutritiva subrayando que cada plato servido influye en la salud, el rendimiento académico y la estabilidad emocional de quienes acuden diariamente a las aulas.

La entrega de reconocimientos, realizada como muestra de gratitud, también buscó visibilizar el rol fundamental que desempeñan estas mujeres en el desarrollo de la niñez, ya que destacaron que más allá de preparar comida, aportan un acompañamiento constante que permite que los menores encuentren en la escuela un espacio seguro, ordenado y cálido.

Las cocineras compartieron parte de su rutina, explicando que su esfuerzo inicia desde muy temprano para asegurar que los alimentos estén listos a tiempo y que cada niño reciba una porción adecuada y balanceada señalando que la organización, la limpieza, la distribución y el control de porciones requieren de un trabajo coordinado y de una responsabilidad que pocas veces se reconoce, pero que es fundamental para el funcionamiento de los planteles.

La presidenta del DIF reiteró que continuará fortaleciendo el "Programa de Alimentos Escolares" y brindando acompañamiento a quienes lo operan diariamente destacando que reconocer el trabajo de las cocineras no solo dignifica su esfuerzo, sino que también impulsa la mejora continua del servicio alimentario, asegurando que las niñas y los niños de Hueytamalco reciban atención de calidad que contribuya a su crecimiento y aprendizaje.